¿Cuánta vitamina B necesito?
Si sólo se necesitas B12, la cantidad recomendada es de 10 microgramos al día (o 2 mg a la semana). Las recomendaciones para el ácido fólico son de 200 microgramos al día. Sin embargo, las mujeres que intentan concebir o que ya están embarazadas deben tomar 400 microgramos diarios adicionales además de esto. Cada una de las demás vitaminas del grupo B tiene una ingesta recomendada diferente según el sexo y suelen indicarse en microgramos: un microgramo es 1000 veces más pequeño que un miligramo (mg).
Normalmente, la suplementación no es perjudicial. Sin embargo, tomar más de 200 mg p/día de vitamina B6 puede provocar entumecimiento o pinchazos en brazos o piernas. Las dosis excesivas de ácido fólico pueden ocultar síntomas de carencia de vitamina B12 en personas mayores.
¿Cuál es la relación entre la vitamina B y la salud de la piel?
Los niveles bajos de vitamina B están relacionados con la dermatitis (piel seca) y la mala salud general de la piel. La vitamina B es importante para el mantenimiento de la capa barrera de la piel y para sostener la estructura cutánea. La vitamina B es importante para promover el crecimiento de nuevas células cutáneas, lo que es importante para ayudar a curar la piel dañada.
5 Beneficios del uso de un suplemento de vitamina B
Como se ha mencionado anteriormente, la vitamina B está asociada a múltiples propiedades beneficiosas para la salud:
Aumento de la producción de ácidos grasos
Aunque pueda sonar negativo, los ácidos grasos son esenciales para la buena salud de la piel. La piel es un órgano de múltiples capas que necesita colágeno y otros ácidos grasos para mantener su estructura. Las vitaminas B contribuyen a la producción de ácidos grasos. La suplementación puede hacer que la piel tenga un aspecto más joven y brillante. La biotina (B7) es especialmente buena para esto.
Mejora de la función inmunitaria
Las vitaminas B12, B2 y B6 pueden ayudar a potenciar la inmunidad favoreciendo la función de las células T asesinas naturales y otros glóbulos blancos. Estas son las células encargadas de eliminar los virus y bacterias no deseados que causan infecciones. Un sistema inmunitario debilitado puede provocar hipopigmentación y una mayor probabilidad de reacciones irritantes, como la dermatitis de contacto.
Reducción de la inflamación
Las vitaminas B12, B2,B5, B6 y el ácido fólico tienen propiedades antiinflamatorias. Se ha demostrado que la suplementación con estas vitaminas reduce las afecciones inflamatorias de la piel. Algunos ejemplos son el acné y la psoriasis. Los niveles bajos de vitamina B también pueden aumentar el riesgo de alergias, ya que éstas suelen deberse a una respuesta inflamatoria.
Aumento del flujo sanguíneo
La vitamina B3 (niacina) se utiliza a menudo en productos para el cuidado de la piel, ya que provoca la apertura de los vasos sanguíneos. Esto aumenta el suministro de oxígeno y la entrega de nutrientes a una zona. También puede mejorar la eliminación de productos de desecho, lo que reduce la acumulación de bacterias y suciedad en la piel.
Cabello más fuerte
El ciclo medio del cabello es de unos 3 meses o 100-120 días. La etapa final del ciclo es la fase exógena, en la que se produce la caída. La carencia de vitamina B2, B7, B12 y ácido fólico se ha relacionado con una mayor caída del cabello. La vitamina B7 (biotina) se encuentra a menudo en los suplementos para el cabello y las uñas, ya que puede afectar al ciclo capilar, debido a su papel en la señalización celular.
Fuentes naturales de vitamina B
Algunas fuentes animales de vitamina B son el pescado, el cerdo, el pollo, la ternera y los huevos.
Las fuentes vegetales son abundantes en muchas de las vitaminas B, excepto en la vitamina B12. Entre ellas están las alubias, el tofu, los aguacates, los frutos secos y las verduras de hoja verde oscura.
Mensaje para llevar a casa
La suplementación con vitamina B tiene muchos beneficios. Ayuda a mejorar la calidad del cabello, las uñas y la piel, la función cognitiva y a prevenir la inflamación y las respuestas inflamatorias asociadas.
Sin embargo, si tienes alguna duda o necesitas ayuda con algún problema médico, ponte en contacto con tu médico de cabecera. Este artículo no debe utilizarse como sustituto del asesoramiento médico.
